Esta arquitectura permite describir variados puntos de vista (tecnológico, negocio, información, responsables, entre otros), sus atributos y las relaciones entre los mismos, ofreciendo una visión holística de una organización, lo que ha derivado en diferentes tipos de arquitecturas de TI como la Arquitectura Empresarial, Arquitectura de Aplicación, Arquitectura de Datos, Arquitectura de Infraestructura y otras de más bajo nivel como la Arquitectura de software y de componentes.

Este conjunto de arquitecturas al igual que un ser vivo crecen, evolucionan y se adaptan a la dinámica de los ambientes cambiantes ligados al desarrollo de las organizaciones. Para lograr este propósito se debe mantener una permanente retroalimentación entre la investigación y la práctica industrial, lo que motiva a desarrollar métodos, teorías y tecnologías para un uso efectivo de la arquitectura de TI y encontrar oportunidades para reducir costos. Además, se requiere identificar y madurar prácticas sustentadas en principios, personas y servicios de modo que se pueda garantizar las necesidades del negocio y evaluar el cumplimiento de los objetivos estratégicos. Así mismo consolidar sólidas bases de conocimiento para hacer mejores recomendaciones y apoyar la toma de decisiones a partir de los requerimientos de arquitectura expresados por sus stakeholders. La investigación como fuente inspiradora permite identificar, proveer y madurar las prácticas, modelos y definiciones de arquitectura para ofrecer soluciones innovadoras que favorezcan una evolución controlada de la industria bajo unos ambientes dinámicos y las exigencias cambiantes del mercado. 

Y aunque en ocasiones se vislumbra una línea gris entre la investigación debido a su enfoque académico y las realidades industriales, es posible afirmar que los avances a nivel de arquitectura en las diversas tecnologías han sido el resultado de un trabajo conjunto entre estos dos mundos.

Son innumerables los casos de éxito en que la arquitectura de TI ha ofrecido soluciones para dinamizar el éxito organizacional en dominios como: financiero, telecomunicaciones, comercio electrónico y entretenimiento. En este propósito se analizan los objetivos de las organizaciones y sus metas para dar soluciones basadas en las mejores prácticas, que solamente pueden ser logradas a través de una interacción y dialogo entre investigación y práctica industrial.

Partiendo de esta simbiosis entre la industria y la investigación se deben resolver los retos futuros y proponer soluciones de arquitectura innovadoras. De esta manera nosotros como arquitectos, ingenieros e investigadores tenemos un papel revolucionario y fundamental en la evolución y crecimiento fundamentado de la industria y prácticas en nuestro país.